El campo se ha quedado sin manos para trabajar la tierra. Los agricultores han tomado las calles de Motril para reclamar a las administraciones y las comercializadoras un cambio estructural en el sector que mantenga sus precios en el mercado europeo en un inicio de campaña que ha sido fatídico para Andalucía, especialmente para Granada y Almería, que deja a cultivos como el tomate, el pimiento y el pepino herido. La crisis que atraviesa la agricultura ha congregado a cerca de 3.000 personas en Motril.
Entre pitidos y lazos verdes, la comitiva ha partido de la plaza de la Aurora, ha seguido por la avenida de Salobreña y ha desembocado en la plaza de la Coronación. Las calles se han convertido en la línea de salida para una batería de medidas y protestas que pondrán en marcha las organizaciones para evitar la «extinción» de la horticultura si el Ejecutivo no toma cartas en el asunto. El campo le lanza el guante al Gobierno y pide que se elabore una nueva ley agroalimentaria
La movilización ha contado con el apoyo de las principales asociaciones agrarias y las formaciones políticas de la provincia.
«Sentimos el apoyo de la sociedad pero nos falta que una parte pequeña del sector estuvieran haciendo suyo el problema. El sector se está desregulrizando. Exigimos que se cumplan los acuerdos y se tengan los mismos derechos que en otras zonas del planeta. No podemos estar subyugados a las caprichosas designios del tribunal de la competencia en España. Solo pedimos que no se venda por debajo de los costes de producción», ha asegurado en declaraciones a los medios de comunicación Miguel del Pino, responsbale de Asaja.
Por su parte, Nicolás Chica, secretario general de UPA-Granada ha manifestado que la situación en Granada atraviesa en una situación crítica. «No hay una semana que no se cierre una explotación agrícola y ganadera por falta de rentabilidad. Las grandes superficies son responsables con sus políticas destructivas en los bajos precios que están fijando. Pedimos una mayor implicación de las administraciones, el Gobierno y la Unión Europea para salvar la agricultura. El sector tiene un gran peso en Granada y es uno de los elementos de desarrollo. Sin la agricultura no podemos cubrir el contingente de la despoblación para que sigan viviendo en nuestros pueblos», ha asegurado. «Es necesario fijar un nuevo modelo de producción para que las grandes superficies no vendan a pérdidas. No se respetan los aranceles en terceros países», ha mantenido.
«Llevamos varias campañas arrastrando unos precios muy por debajo del coste de producción. En la costa de Granada viven muchas familias de esto y hemos convocado porque será el principio de muchas actuaciones. La COAG mantiene que más de la mitad del sector se ha unido a la parada y ha cerrado sus invernaderos», ha añadido Miguel Monferrer, secretario de Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos .
«No cubrimos los costes de producción y estamos bajo la rentabilidad. El problema afecta a 20.000 puestos de trabajo en la Costa. La luz, el agua, los productos fitosanitarios encarecen la producción y los beneficios que recibimos no alcanzan para poder subsistir», ha denunciado Pedro Ruiz de la cooperativa La Palma.
Por último, Fulgencio Torres, presidente de la Federación de Cooperativas Agroalimentarias de Granada, ha destacado la necesidad de crear una nueva ley agroalimentaria nivel europeo para subertir los desajustes y la competencia desleal entre los países extracomunitarios y los europeos que tiran los precios al suelo. Las asociaciones han destacado que estiman que más de la mitad de los agricultores de la provincia han secuandado la parada. Las cooperativas granadinas reciben cerca de 3 millones de kilos de producto a diario y calculan que con el cese de actividad recibirán un 10% menos.
Reacciones
Más de 13.000 agricultores han secundado la manifestación en Almería, Málaga y Motril. Las principales formaciones políticas de la provincia granadina han reclamado al unísono soluciones para la agricultura. En este frente común y encabezando la manifestación se podía encontrar a Gerardo Sánchez, diputado andaluz del PSOE,la coordinadora, Elvira Ramón, y la senadora Sandra García.
«La importancia del sector es fundamental no solo para la Costa sino también para toda la provincia. De este sector dependen muchos puestos de trabajo y gran parte de nuestra economía. Reivindicaciones que desde todos los gobiernos, instituciones y grupos políticos deben de ser atendidas y prestársele atención». »Tenemos que dejar a un lado las consignas políticas y luchar por disminuir los costes, terminar las tuberías de Rules y que llegue el agua a la Costa, además de poner mecanismos para que nuestros productos compitan en igualdad de condiciones con los de otros países«, ha amntenido el diputado socialista
La presidenta de la Mancomunidad de Municipios, María José Sánchez, la alcaldesa de Motril, Luisa García Chamorro, y el equipo de Gobierno también han estado presentes en la comitiva.
«Hay que decir ¡basta ya! Lo tenemos claro, Motril vive casi exclusivamente de la agricultura y no es de recibo lo que están sufriendo los agricultores temporada tras temporada», ha expresado García Chamorro quien aseguró que «estaremos al lado de los agricultores y nos da igual quien sea la administración responsable», ha advertido la alcaldesa.
Por último, el teniente de alcalde de Urbanismo, Medio Ambiente y Agricultura del Ayuntamiento de Motril, Antonio Escámez, ha calificado de «increíble» la situación del agro costero frente a la entrada de productos de otros mercados «y ahí tenemos el ejemplo del pepino, de la ruina y el desamparo a que se enfrentan los productores año tras año, llevándolos a prácticamente sobrevivir de sus cultivos». El responsable municipal de Agricultura ha denunciado, además, que «no se puede hacer pagar al agricultor la crisis agrícola, sino que tienen que asumirlo los que la provocan». «Las movilizaciones como la de hoy deben servir para despertar la conciencia colectiva de una comarca que vive de la agricultura, «además de reivindicar con fuerza una solución definitiva para el agua de nuestros campos».