El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, ha subrayado hoy la «fantástica coordinación» entre España y Francia para presentar una estrategia común en el próximo Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea, «donde intentaremos cerrar un gran acuerdo político sobre los reglamentos de la Política Agraria Común (PAC)». El ministro ha agradecido «la espléndida colaboración de Francia con España en la defensa de la agricultura, la ganadería y la pesca».
Miguel Arias Cañete hacía estas manifestaciones en la rueda de prensa conjunta que ha mantenido junto al ministro de Agricultura de Francia, Stéphane Le Foll, tras una «intensa reunión de trabajo», en la sede del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, en la que han participado la secretaria general de Agricultura, Isabel García Tejerina, el embajador francés, Jerome Bonnafont y delegaciones de ambos ministerios.
En relación con la reforma de la PAC, el ministro español ha destacado que ambos gobiernos valoran «muy positivamente» el voto del Parlamento Europeo sobre los reglamentos, «que constituye un buen primer paso hacia un resultado final satisfactorio», ya que se ha mejorado sustancialmente para España la propuesta inicial de la Comisión. No obstante, el ministro ha avisado de que todavía quedan elementos en las propuestas que la Presidencia irlandesa va a presentar «que merecían ser debatidos por los dos Estados miembros».
Así, Arias Cañete se ha referido en primer lugar al tema de la convergencia interna, es decir, la igualación de las ayudas dentro de los distintos Estados miembros, «donde existe una coincidencia de pareceres entre España y Francia, en el sentido de que una convergencia absoluta de ayudas para todos los productores a un nivel unitario igual al final del periodo del año 2019 podría ser muy lesiva para el desarrollo de los sistemas productivos de nuestras agriculturas», ha asegurado.
Ante esta situación, Arias Cañete ha señalado que se van a buscar fórmulas de apoyo a la Presidencia irlandesa, para que se pueda flexibilizar y limitar esa convergencia interna «para hacerla aplicable en función de las características internas de nuestra agricultura».
Según ha explicado el ministro, ambos países también han coincidido en la necesidad de elevar los porcentajes de la propuesta de la Comisión para los pagos acoplados, es decir, de las ayudas que se pueden conceder completamente acopladas a un sector.
Arias Cañete también ha expresado la necesidad de buscar que el greening, o reverdecimiento, tenga una redacción final que integre los cultivos permanentes, como es el caso del olivar.
Por otro lado, Arias Cañete ha recalcado la importancia de buscar el acuerdo «con otros países potentes de la Unión Europea, como Alemania, en la búsqueda de una propuesta equilibrada que permita un apoyo global a la posición del Consejo, con vistas al trílogo que hay que mantener a continuación con la Comisión y con el Parlamento Europeo».
Arias Cañete, que ha calificado el encuentro como «muy fructífero», ha explicado que los dos países han establecido futuros cauces de actuación para trabajar en el sector lácteo y en el sector de las frutas y hortalizas, «coordinando las posiciones de nuestros países para que las reglamentaciones del futuro de la Comisión Europea puedan ser eficaces, impidiendo caídas de precios brutales y garantizando rentas suficientes para los productores comunitarios».
Para subrayar la buena colaboración entre los dos países, Arias Cañete ha recordado que, en las pasadas discusiones del Marco Financiero Plurianual de la UE, «si no hubiera sido por la excelente coordinación de nuestros países, los agricultores europeos hubieran tenido unos presupuestos sustancialmente más reducidos». Según ha asegurado, gracias a esta colaboración «se consiguieron incorporaciones adicionales en el primer y segundo pilar de la PAC (ayudas directas y desarrollo rural), en coordinación también con Irlanda, de enormes resultados».
Por su parte, el ministro francés de Agricultura ha explicado que ayer se reunió con su homólogo de Irlanda de cara a la reunión del próximo Consejo de Ministros de la UE de la semana que viene, y que su visita a Madrid ha servido para consensuar posiciones «firmes y claras» entre los dos países