El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, ha asegurado hoy que el sector agroalimentario español «cumple una gran función contribuyendo a la seguridad alimentaria, gestión del territorio y del paisaje, y origen y soporte de nuestra cultura y tradiciones rurales». De hecho, «este sector es responsable del 7,8% del PIB nacional y genera 1,8 millones de puestos de trabajo».
Así lo manifestaba durante la firma de un convenio entre el Ministerio y la Real Academia de Gastronomía, representada por su presidente Rafael Anson, para la promoción y orientación del consumo de productos agroalimentarios y pesqueros. En su intervención, Arias Cañete ha subrayado la «plena actualidad» de la gastronomía, donde España ha alcanzado «las más altas cotas en la cocina internacional», gracias a una eficaz combinación de materia prima de alta calidad, una técnica innovadora y destacable creatividad.
En opinión del ministro, los chefs españoles se han ganado el título de «grandes embajadores de nuestro país, de la Marca España, de la que nuestra gastronomía es una importante seña de identidad, en el marco de una trilogía que se apoya y se desarrolla en cada una de sus partes: alimentación, gastronomía y turismo». En este sentido, Arias Cañete ha apuntado que más del 10% de los 57 millones de turistas internacionales que vinieron a España el pasado año tenía como motivación principal de su viaje la gastronomía, turistas que luego difunden en sus países los valores de los productos agroalimentarios españoles.
Conscientes de la calidad y reputación de los productos españoles, el ministro se ha comprometido «a trabajar tenazmente para prestigiar, informar y difundir nuestra gastronomía a todos los niveles, como avanzadilla de uno de los puntales de la Marca España». En esta labor, Arias Cañete considera que la Real Academia de Gastronomía «es el mejor socio para un proyecto que consideramos apasionante», ya que cuenta con el mejor plantel de expertos en gastronomía española.
Para ello, Arias Cañete ha anunciado que se van a establecer cauces que permitan la coordinación y el intercambio de información y opiniones entre el sector y la Administración. En palabras del Ministro, «el convenio aúna voluntades, equipos y esfuerzos. No supone un gasto superior, sino una mejor utilización de los recursos propios». En definitiva, una colaboración «para bien de nuestra gastronomía y de nuestra agroalimentación de calidad», ha concluido.