El consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez Haro, ha visitado Beas de Segura (Jaén) para conocer sobre el terreno los daños producidos en esta zona debido a los últimos temporales. El representante del Gobierno andaluz ha recordado que el martes pasado se aprobó en Consejo de Gobierno el decreto ley para la financiación extraordinaria de arreglos y obras de emergencia en caminos de acceso a zonas agrícolas y ganaderas que han resultado dañadas por fenómenos meteorológicos adversos, desastres naturales y otras catástrofes acaecidas en Andalucía en los últimos tres meses.
En concreto, se van a destinar 20 millones de euros, cofinanciados con fondos Feader, de los que se van a poder beneficiar 88 municipios andaluces, once de la provincia de Jaén: Alcalá la Real, Alcaudete, Beas de Segura, Cabra de Santo Cristo, Castellar, Huelva, Jódar, Peal de Becerro, Úbeda, Villacarrillo y Villanueva del Arzobispo.
Tras la visita del consejero a las provincias de Málaga y Sevilla para comprobar de primera mano los destrozos sufridos en este tipo de infraestructuras rurales en los municipios de Casarabonela, Carratraca, Ardales, Tebas, Martín de la Jara, Osuna, Écija y El Rubio, el consejero se ha trasladado a este municipio de Jaén, donde ha reiterado el compromiso de la Junta de elaborar un plan de actuación inmediata. «Nuestra prioridad en estos momentos es posibilitar que se lleven a cabo las labores de reparación necesarias para que se recupere la normalidad de la actividad lo antes posible».
Por ello, según ha informado, se le ha remitido una carta a todos los ayuntamientos afectados para que indiquen, con exactitud, su problemática, la cantidad de caminos y puntos kilométricos que han resultado afectados. «A partir de ahí se elaborará un plan de actuación inmediata que se llevará a Consejo de Gobierno en un mes para, acto seguido, empezar a trabajar».
La partida presupuestaria habilitada por la Consejería permitirá acometer las obras necesarias para la reparación y mejora de los caminos de titularidad pública que, debido a este tipo de fenómenos meteorológicos, hayan resultado dañados dejando aisladas explotaciones agrícolas y ganaderas e impidiendo la ejecución de tareas para el mantenimiento del potencial productivo.