La patata nueva andaluza sufre la competencia desleal de países que comercializan patata de conservación como si fuera fresca. La consejera del sector, Carmen Ortiz, ha trasladado al Ministerio la preocupación de Andalucía por esta situación. Los consumidores podemos identificar la patata local por su piel fina y porque conserva su tono dorado una vez frita. De hecho, Andalucía es la principal productora de patata temprana, gracias a su climatología que permite su cultivo prácticamente durante todo el año.
Actualmente, hay 10.110 hectáreas andaluzas de cultivo de patata y una producción de casi 297.000 toneladas. El 39% de la superficie total se encuentra en Sevilla, seguida por Cádiz, con un 18%, y Málaga, con un 13%. De los cuatro tipos de patata que se siembran en Andalucía (extratemprana, temprana, media estación y tardía), la temprana es la que tiene mayor relevancia, y supone el 44% de toda la superficie sembrada, seguida de la de media estación, que ocupa alrededor del 33%.
El valor de la producción en 2015 ascendió a 78,47 millones de euros, un 6,55% más que en 2014, con 73,64 millones de euros.
La exportaciones de 2015, sin incluir la patata de siembra, aumentaron un 41% con respecto a 2014 en valor manteniendo el mismo nivel en volumen. Con respecto a la patata temprana, el aumento de las exportaciones fue mayor, un 68% más en valor y un 9% más en volumen. Por provincias, el 89% de las exportaciones andaluzas provienen de las provincias de Sevilla y Cádiz, siendo Sevilla la que más ha exportado, alcanzando el 74% de las patatas frescas andaluzas. Con respecto a la patata temprana fresca exportada el año pasado por Andalucía, un 68% procede de Sevilla y un 29% de Cádiz.
Los principales países destino de las producciones andaluzas son Alemania, Bélgica, Reino Unido, Francia, Países Bajos y Portugal.