Vicasol albergó ayer una fiesta con motivo de la inauguración de sus nuevas instalaciones en la que participaron sus agricultores socios y trabajadores, representantes de otras empresas hortofrutícolas de Almería, organizaciones agrarias, asociaciones de comercializadoras, Cámara de Comercio, Interprofesional Andaluza de Frutas y Hortalizas, así como un amplío elenco de políticos, encabezados por José Antonio Griñán, presidente de la Junta de Andalucía, que fue el encargado de inaugurar el nuevo espacio de la empresa, motivo de júbilo entre los presentes. Vicasol aumenta así su capacidad productiva con 16.000 metros de superficie en la que llevará a cabo, además de parte del proceso de confección y envasado de producto, la carga de los pedidos y el almacenaje de materiales utilizados en la preparación de los mismos. El presidente de Vicasol, Juan Antonio González, manifestó que en la cooperativa, «apostamos por la dimensión, por aumentar nuestra capacidad, pero sin renunciar a la sencillez, uno de nuestros pilares. Crecimiento y humildad, no están reñidos».
El nuevo espacio, reservado para la confección de tomate, permitirá «canalizar una producción anual de 150 millones de kilos de productos hortofrutícolas». Hace dos campañas, la cooperativa logró un crecimiento del 8%, y en la pasada, este porcentaje se elevó hasta el 13%. En estos momentos, según los datos ofrecidos por el presidente de la cooperativa, en el acto de inauguración, «Vicasol cuenta con 500 socios agricultores que producen frutas y hortalizas en, aproximadamente, 1.100 hectáreas». Ofrece trabajo a 1.300 personas y, con la ampliación, la empresa estima que aumentará el número de trabajadores, incorporando a 200 personas más, por lo que esperan alcanzar la cifra de 1.500 empleados.
La inversión realizada se situó en los seis millones de euros, entre el valor del suelo adquirido y la implementación de las obras. Parte de este desembolso se ha financiado con cargos a los Fondos Operativos que le corresponden como Organización de Productores de Frutas y Hortalizas. Este apoyo económico que procede de la Política Agraria Común ha supuesto el 25% de la inversión total, según apuntó José Manuel Fernández, gerente de Vicasol. El proyecto de ampliación se inició en el verano de 2011, hace tan sólo año y medio, «un tiempo récord», como valoró Antonio Bonilla, alcalde de Vícar durante su intervención pública en el acto.
El presidente de la Junta de Andalucía, tras conocer todos los rincones de las instalaciones, nuevas y antiguas, de la cooperativa, acompañado por representantes de la Junta de Andalucía en la provincia, militantes del PSOE, el alcalde del municipio de Vícar, y los responsables de la entidad, manifestó, en su discurso, alabó el buen hacer del sector agroalimentario almeriense y lo puso como ejemplo de «la fórmula a seguir para lograr el éxito». Y es que, José Antonio Griñán afirmó ser «un admirador de la provincia» porque «ha dado un salto cualitativo de la mano de lo que produce valor, exige esfuerzo e investigación, así como capacidad de ganar mercados». Todos los requisitos para afrontar con determinación el futuro de una economía, residen en el sector agrícola almeriense, según el presidente del Ejecutivo andaluz. En un contexto de crisis como el actual, «esta actividad que se desarrolla en la provincia aguanta», a diferencia de «atajos tomados en la economía que dieron lugar a burbujas que terminaron en desplome», ya que «es un ejemplo de lo que es posible hacer. Hay un camino y es este, el de emprender y arriesgar pero con la certidumbre de que el riesgo es menor cuando se hacen bien las cosas, cuando se sabe que lo que se ha hecho hoy será peor de lo que se hará mañana», aseguró José Antonio Griñán.
Griñán enumeró los principales problemas a los que hay que hacer frente para procurar un desarrollo del sector seguro. Entre ellos, hizo alusión a la competencia desleal que se ejerce por parte de países terceros, que hacen que «en un mercado tan exigente como el europeo no todos compitan en igualdad de condiciones». Es por ello por lo que Griñán hizo un guiño a los dirigentes nacionales y europeos, con el objetivo de que vigilen los acuerdos establecidos entre la Unión Europea y terceros países, así como que exijan a los productores extra comunitarios los mismos requisitos que se piden a los europeos, tanto sociales, como laborales y fitosanitarios.
El conocimiento del sector agrícola, para José Antonio Griñán, es un bien, que, como los mismos productos, «hay que exportar al mundo, ya que este sector está en disposición de ofrecer lo que en otras zonas se demanda».
Para seguir creciendo es importante, apuntó José Antonio Griñán, mejorar las comunicaciones entre Almería y el resto de Europa, con el fin de progresar en el transporte de frutas y hortalizas. El presidente de la Junta exigió al Gobierno central que Almería «no sea olvidada» en las conexiones del Eje Mediterráneo. Un mensaje que encontró la respuesta de José Cara, parlamentario andaluz, asegurando que «habrá conexión».
Griñan: «La financiación debe servir a la economía productiva»
El presidente de la junta de Andalucía, José Antonio Griñán, fue crítico con los tintes adquiridos por la financiación en la economía globalizada. En este sentido, comentó que hay que dar un giro. Y es que, Griñán, reconoció que «hace falta financiación para mantener el progreso de sectores como el que configura la agricultura de Almería». En estos momentos, «el movimiento especulativo de los mercados financieros se está situando por encima de la economía productiva y hay que tratar de subordinar la economía financiera a la economía productiva», afirmó. Ante ello, sentenció «hace falta que la Administración Pública no entorpezca y acompañe, se necesitan infraestructuras, investigación para la producción e introducir mejoras en la venta de productos que repercuta en la renta del agricultor». En definitiva financiación para invertir.
