El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha organizado hoy una Jornada sobre exportaciones agroalimentarias al mercado chino, la ultima de las dedicadas al «Diseño e Internacionalización para cuatro mercados estratégicos» que se enmarcan en el Programa de Alta Formación para gestores de la Cadena Alimentaria que desarrolla el Departamento.
«El objetivo de estos cursos es abordar estrategias ganadoras de comercialización en mercados internacionales, desde el punto de vista del diseño, tanto de productos como de conceptos nuevos», ha puntualizado el Subdirector General de Estructura de la Cadena Alimentaria del Ministerio, Jose Miguel Herrero, durante la inauguración de la Jornada, subrayando que «el conocimiento de los mercados de destino y especialmente sus hábitos de consumo y comercialización son necesarios para evitar los fracasos cuando se exporta».
Herrero ha explicado que el Ministerio está elaborando un Plan de internacionalización, uno de cuyos objetivos es capacitar a los empresarios para que salgan al exterior. Herrero ha señalado que para ello «la formación, junto con la internacionalización, el fortalecimiento del sector primario y el mejor funcionamiento de la cadena alimentaria son los grandes ejes prioritarios para conseguir un sector agroalimentario más competitivo y eficiente».
EL MERCADO Y EL CONSUMIDOR CHINO
Durante la Jornada, desarrollada por el Centro Tecnológico Andaluz de Diseño (SURGENIA), se ha explicado como China se ha convertido en centro de conversaciones de negocios y en las miras de toda empresa que se plantea la internacionalización.
En cuanto a su economía se ha subrayado que ocupa el segundo lugar en cuanto a tamaño por detrás de EEUU, sobrepasando a Japón hace no muchos años, aunque todavía su PIB per cápita dista de las cifras de países desarrollados como Japón. Otro factor que se ha destacado ha sido el de su población urbana, que supone el 47 por ciento, con un crecimiento medio de 10 millones por año, por lo que se espera que en 2025 aproximadamente el 60 por ciento de su población sea urbana.
En relación con los mercados, se ha resaltado la posición de España como tercer país europeo exportador de productos agroalimentarios a China, especialmente cárnicos (cerdo); aceite de oliva; vinos; pescado y marisco; otras bebidas alcohólicas, panadería y bollería, bebidas sin alcohol y lácteos.
En esta línea la Directora de Internacional e Investigación en Diseño de Surgenia ha señalado que «China en general, y especialmente Shanghai, tiene cada vez más interés y curiosidad por los productos nuevos provenientes de otros países, en concreto, los productos españoles están de moda y abundan los restaurantes españoles y los bares de tapas, aunque regentados la mayoría por chinos».
Asimismo, ha añadido que «en Shanghai existe una veintena de restaurantes de comida española o de tapas, y todos ellos tienen muy buena aceptación».
En cuanto a los hábitos se ha explicado que en China es muy común ofrecer productos agroalimentarios como regalo en cualquier ocasión, destacando como, en el ámbito de los negocios, esos regalos son obligatorios, siendo común ofrecer té o vino, empaquetados generalmente en rojo, y, menos comúnmente, en azul.
Sobre los factores que más influyen a la hora de elegir un producto, se ha destacado el precio, si bien en productos importados aceptan precios más elevados. Tanto el origen del producto como las propiedades saludables del mismo son también factores tenidos en cuenta, sin embargo la marca no es algo decisivo.
En la Jornada se han detallado algunas características sobre el consumidor chino, calificado como «Smart Shopper»; marquista, influenciable por la marca, pero no por ello monomarca e interesado tanto por las funcionalidades prácticas o supuestamente atribuibles del producto, como por vivir una experiencia al consumir un producto importado.
También se ha resaltado como, ante la ausencia de valor percibido (funcionalidades o ventajas), prefiere una marca local o en general la más barata, destacándose que en general este consumidor es influenciable por la publicidad boca a boca y por la promoción en punto de venta.
EXPORTACIONES A INDIA
En el marco de estas Jornadas, que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente financia en un 70 por ciento, el pasado lunes se celebró la dedicada a los mercados en La India, un país que la empresa encargada de su desarrollo, Surgenia, calificó como «país de extremos», altamente agrícola (17 por ciento PIB) y a la vez proveedor mundial de software y tecnologías de la información (servicios: 54 por ciento PIB).
Entre sus características culturales y sociales también se resaltó la complejidad de castas y la infinidad de religiones e idiomas, señalando, sobre estos últimos, algunas curiosidades como que hola es igual que adiós (namaste), mañana es igual que ayer (cul) y el viaje es también peregrinaje (yatra).
En términos de población se destacó que se trata del segundo del mundo por número de habitantes: 1.205 millones y con un PIB de 3.493 trillones de euros, indicándose que se trata del segundo país del mundo en cifra de población activa, con más de la mitad de su fuerza de trabajo situada en la agricultura.
En temas de mercado se destacaron las exportaciones españolas al país, principalmente aceite de oliva; aceitunas; bollería y confitería; bebidas analcólicas, pescado y marisco, cárnicos, vinos y lácteos.
En cuanto a las oportunidades para las empresas españolas se resaltaron algunos factores como el aumento de ingresos y cambios en los hábitos del consumidor indio; la estructura demográfica favorable, con una población extremadamente joven: un 30% está entre los 0-14 años y un 65% entre los 15-64 años, así como la proliferación de Mega Parques Alimentarios y Zonas económicas Especiales.
También se abordaron las principales características del consumidor indio, destacando como la comida juega un papel muy importante en el día a día; el creciente interés en las clases más altas por la gastronomía, pero con una cultura gastronómica mucho más limitada que en occidente; la valoración y curiosidad por lo nuevo y el arraigo de sus gustos con preferencia por los sabores fuertes, especiados, ácidos y picantes.
Otros aspectos destacados fueron la predisposición de la clase media-alta para probar, con hábitos traídos en ocasiones del extranjero, la importancia de la comida en celebraciones y en el culto religioso (simbología en bodas y ofrendas) y el papel de las religiones en la gastronomía con alimentos vetados, tomando en cuenta que el 80 por ciento de la población es hindú, y el 13,4 por ciento musulmana.
En cuanto a las preferencias la hora de adquirir un producto agroalimentario, se ha señalado que el consumidor indio evalúa, principalmente, el precio y el sabor, la higiene del producto y su presentación, la practicidad (facilidad de almacenaje y de uso), la frescura, por las condiciones higiénicas y ambientales y los beneficios para la salud.
Todos los participantes en estas cuatro Jornadas sobre mercados estratégicos para el sector agroalimentario, han recibido el libro «Gastrotendencias 2011 – 2012» en el que se analizan los núcleos de consumo, los factores de cambio en relación con los consumidores y la incorporación de las nuevas tendencias de diseño