Inspectores del Servicio de Desarrollo Pesquero de la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente han decomisado 32 cajas con ejemplares de pulpo inmaduro, que en total pesaban 304 kilos. Las cajas se encontraban en unos almacenes del puerto pesquero de Almería, y fueron decomisadas cuando estaban siendo manipuladas por personal que no aportó documentación alguna sobre la procedencia de los cefalópodos. Los ejemplares decomisados pesaban entre 500 y 700 gramos, cuando el reglamento establece un mínimo de 1.000 gramos.
El producto, una vez que la Administración sanitaria ha comprobado que es apto para el consumo humano, se ha entregado al Banco de Alimentos y a varios centros benéficos de Almería.
Si el pescado inmaduro no se hubiera capturado y hubiera alcanzado la edad adulta, los 304 kilos habrían superado los 2.000 kilos de peso, y además habrían puesto en torno a 100 millones de huevos, según ha llamado la atención el delegado de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, José Manuel Ortiz. La sanción prevista para estos casos de pesca de inmaduros puede ascender a 2.000 euros.
Campañas de concienciación
La Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente realiza campañas de concienciación con el fin de sensibilizar a los ciudadanos del mal que provocan la pesca y el consumo de pescado inmaduro. En las campañas se informa de las tallas mínimas exigibles al pescado para su consumo y de la importancia que tiene respetarlas para preservar la continuidad de los recursos pesqueros.
La Consejería apela a la colaboración de los ciudadanos para que rechacen y denuncien la venta y comercialización de productos pesqueros inmaduros, ya que para poder erradicar la pesca ilegal además de la labor de inspección que realiza la Administración, es fundamental que los consumidores dejen de comprar y consumir pescado inmaduro.