José Manuel Ortiz, delegado territorial de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente ha destacado la aportación del cultivo del almendro, así como la de otras actividades agrícolas y ganaderas al desarrollo de las comarcas del interior de Almería. «La almendra contribuye de una forma casi insustituible a la sostenibilidad social del territorio, ya que si bien no se puede decir que haya quienes puedan vivir sólo de su cultivo, sí es verdad que supone un complemento de las rentas que se obtienen de otros sectores productivos, y esto es lo que al fin y al cabo hace que muchos habitantes de las comarcas del interior decidan seguir viviendo en sus pueblos». Así lo ha puesto de manifiesto el representante de la Junta de Andalucía durante su intervención en el acto de inauguración de una jornada técnica sobre la evolución de las nuevas variedades de almendro que ha organizado la empresa de semilleros Almeriplant.
Gracias a esta agricultura, según Ortiz, «se está consiguiendo fijar a la población al territorio, evitando el despoblamiento de zonas que de otra forma no tendrían vida, y en el caso de la almendra y otros cultivos, están contribuyendo además a evitar la pérdida de suelos cultivables y a frenar la erosión. Así que, cuando alguien ponga en duda los apoyos públicos a estos sectores, creo que éstas son razones de peso para convencerlos del buen fin que tienen las ayudas de las Administraciones».
En la jornada, expertos en el cultivo del almendro de centros de investigación de Cataluña, Aragón, Murcia y Andalucía han dado a conocer los resultados de sus trabajos en la mejora genética y tecnológica del almendro, experiencias que tratan de desarrollar y transferir al sector nuevas variedades más resistentes a la climatología y al suelo de las zonas del interior, para incrementar el rendimiento de este producto y hacerlo más competitivo.
En el caso del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera de la Junta de Andalucía, el Ifapa, el coordinador de la Red de Transferencia de Frutos secos ha dado a conocer en la jornada las líneas de trabajo que se desarrollan en la Comunidad andaluza en experimentación y transferencia de conocimientos, como son las relativas a la caracterización y adaptación de variedades de almendro y métodos de poda, resistencia a las heladas y gestión de riego.
El valor de la exportación crece un 25% hasta agosto
El almendro, con una superficie de 59.100 hectáreas -57.300 de secano-, es el cultivo que más presencia tiene en el paisaje de la provincia de Almería, y que con altibajos en sus cosechas, el pasado año rondó las 8.000 toneladas de producción, con una facturación de casi 7 millones de euros. Como en el caso de las frutas y hortalizas de invernadero, Almería también destaca en el panorama andaluz y español por ser una de las principales productoras y exportadoras de almendra.
Buena parte de la producción de almendra de Almería se destina al mercado exterior, un mercado que este año está creciendo en volumen, pero sobre todo en peso, según ha destacado José Manuel Ortiz. Entre enero y agosto pasados, las empresas comercializadoras de la provincia han exportado 2.107 toneladas de almendra, lo que representa un 8,3% más que en el mismo periodo del año pasado. Pero la facturación ha crecido incluso más, ya que ha superado los 9,2 millones de euros, lo que representa un incremento del 25%. Por el contrario, el valor de la almendra importada por Almería hasta agosto (2,0 millones de euros) se ha reducido en casi un 41%.
De acuerdo con los datos del Icex elaborados por la Delegación Territorial de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, el principal destino de la almendra exportada desde Almería es Italia, mercado que ha adquirido casi el 42% del total; le sigue Alemania, con el 39%; Francia con el 13,1%, y Líbano, con el 3%.
Por el valor de las exportaciones de almendra y avellana, Almería es la quinta provincia de España que más vende en el exterior, con una cuota del 5,6%. La clasificación la encabeza Tarragona, seguida de Alicante, Albacete y Murcia.