La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha calificado de pasividad la actitud del Ministerio de Agricultura y la interprofesional citrícola española Intercitrus para afrontar la más grave crisis desde hace mucho tiempo sufrida por los productores.
Unión de Uniones, dentro de la llamada Mesa Nacional de Cítricos convocada por Luis Planas, considera que se han presentado muy pocas novedades y sigue sin plantearse alguna medida de calado que suponga una ayuda directa de minimis a los citricultores que han perdido gran parte o toda su cosecha.
La única medida puesta en marcha hasta la fecha es la de las ayudas a la retirada, de la que sólo el 39% del tonelaje previsto se ha solicitado a escasas fechas de concluir el plazo, aunque el Ministerio anuncia una posible prórroga que no servirá más que para maquillar el fracaso, según el criterio de la organización.
Unión de Uniones ya avanzó en su día que era una medida poco eficaz, que se aprobaba demasiado tarde y que no llegaría de forma directa a los agricultores, tal y como lamentablemente así ha ocurrido.
La organización señala que la situación es insostenible y que sólo en la Comunidad Valenciana se han producido pérdidas directas superiores a los 240 millones de euros, por lo que las medidas deberían ser más contundentes.
Un modelo de interlocución trasnochado
Unión de Uniones lamenta que el modelo de interlocución del Ministerio, también en el sector de cítricos, está trasnochado.
La organización considera que se está dando excesivo peso a los exportadores, interesados en que los precios al productor estén bajos, y una interporfesional fracasada, sin dar espacio a los productores, que son el eslabón más débil, y sin permitir que sean representados democráticamente al no querer convocar elecciones en el sector agrario.