Cultivar en invernaderos tiene multitud de ventajas, especialmente si no se cuentan con las mejores condiciones meteorológicas para el desarrollo de las plantas.
¿Qué beneficios tienen los invernaderos para el cultivo?
Los invernaderos consisten en espacios cerrados principalmente de vidrio o plástico destinados a la horticultura. Las muchas ventajas que estas sencillas construcciones ofrecen al agricultor, hacen que sean una opción cada vez más socorrida para plantaciones que requieren una temperatura y una luz principalmente elevada.
Finalidad del cultivo bajo plástico
Cuando los cultivos se llevan a cabo bajo invernaderos, lo que se pretende conseguir es controlar la humedad del ambiente, la temperatura, y otras variables necesarias para favorecer el correcto desarrollo de la plantación.
El plástico que se utiliza en la construcción de un invernadero tiene la función de protegerlo de las variaciones del clima, y aprovechar el aporte de la radiación solar. Ya que este plástico o vidrio está especialmente diseñado para ello, así como para atrapar la energía en el interior del invernadero.
El resultado final será la acumulación del calor y el incremento de la temperatura del espacio de plantación.
Cómo optimizar los invernaderos
Para lograr optimizar al máximo los invernaderos, la orientación de éstos es fundamental. En este sentido, lo ideal es que esté orientado con su eje longitudinal de este a oeste.
Por otro lado, para optimizar al máximo la luz de esta instalación es importante vigilar que sus paredes estén lo más limpias posibles de agua y polvo, así como impedir que quede a la sombra de algún árbol o de la propia vivienda.
Para reducir la cantidad de luz de los invernaderos, se pueden utilizar mallas de sombreo. Y para aumentar la luz del interior de la plantación en invernaderos pueden utilizarse lámparas de sodio, luces LEC, LED, o cualquier otra que se adapte mejor a las necesidades de temperatura y luz de las plantas del interior.
Otras formas de controlar la temperatura de los invernaderos es colocando sistemas de ventilación en la cubierta o mojando con frecuencia el suelo.
Ventilar los invernaderos es importante para expulsar excedentes de aire caliente y para controlar la circulación del aire en el interior (lo que evitará plagas y enfermedades).
Para controlar la humedad del aire de los invernaderos puede colocarse un higrómetro. Una humedad demasiado elevada puede potenciar el desarrollo de enfermedades y plagas en el cultivo. Mientras que una humedad demasiado baja puede provocar el secado de las plantas de interior.
Cómo y porqué construir un invernadero en casa
Construir un invernadero en casa para nuestras plantaciones más delicadas además de todas las ventajas expuestas anteriormente, supone a los agricultores un importante ahorro de costes. Ya que a veces para mantener las mismas condiciones del invernadero de forma artificial, sería necesario muchísimo dinero en electricidad y equipaciones como extractores.
Hacer invernaderos caseros
Construir un invernadero es bastante fácil, al igual que conseguir uno ya terminado. Además, de esta forma se consigue adecuar el tamaño y la calidad de los materiales en función de las necesidades de cada agricultor.
Qué tener en cuenta antes de hacer invernaderos caseros
Complicarse en la construcción del invernadero suele ir acompañado de una menor efectividad respecto a los montajes más sencillos y prácticos. Por otra parte, hay que tener paciencia, pues como en todo es posible que sea necesario modificar los planes iniciales. Fija un presupuesto y un plazo realista antes de empezar.
Las mejores cubiertas de invernaderos
Las cubiertas de invernaderos traslúcidas permiten que la luz se distribuya mejor. Para fabricarlas, el plástico y la fibra de vidrio son los materiales más económicos. Además, pueden encontrarse con diferentes grados de translucidez.
Entre la amplia variedad de productos que podemos encontrar en Green Money para el cuidado de todo tipo de cultivos, se encuentran los plásticos reflectantes. Este tipo de cubierta es la más indicada para distribuir la luz a las plantas de la forma más eficaz posible. Además, es especialmente útil en cultivos de interior, ya que es esencial que todas las plantas reciban la cantidad de luz que les corresponde.