En el marco del nuevo Programa de Apoyo al Sector Vitivinícola Español 2019-2023, la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural tiene abierto el plazo, hasta el 14 de enero, para solicitar ayudas a la promoción del vino en mercados de terceros países y hasta el día 31 para pedir los incentivos destinados a inversión en instalaciones de transformación e infraestructuras vinícolas.
El Programa de Apoyo al Sector Vitivinícola Español (Pasve) persigue mejorar la competitividad de los vinos españoles, siendo beneficiarios de las ayudas empresas vinícolas, asociaciones y organizaciones de productores, organizaciones profesionales e interprofesionales, consejos reguladores y organismos públicos. Pueden ser objeto de esta promoción vinos y espumosos, así como los aromáticos y de calidad, de aguja y aguja gasificado, ecológicos, de uva pasificada, sobremaduradas y vinos de licor.
En cuanto a las subvenciones para promoción, el objetivo principal es apoyar al sector para llevar a cabo acciones de relaciones públicas, misiones comerciales, promoción, publicidad, presencia en ferias y exposiciones y campañas de información, así como estudios de nuevos mercados en terceros países. En este sentido, los principales destinos en los que se desarrollan estas acciones son EEUU, México, China, Canadá, Suiza, Rusia, Japón, Colombia, Brasil y Australia, entre otros. La intensidad máxima de la ayuda podrá llegar al 50% de los gastos subvencionables.
Por su parte, los incentivos destinados a respaldar inversiones en instalaciones de transformación e infraestructuras vinícolas tienen como finalidad mejorar el rendimiento global de las empresas del sector vitivinícola y su adaptación a las demandas del mercado, así como aumentar su competitividad, impulsando la sostenibilidad integral de las industrias, en lo económico, lo social y lo ambiental; el ahorro de energía, la eficiencia energética global, la utilización de energías renovables y la valorización y tratamiento de los residuos, sin olvidar la certificación ambiental de las instalaciones de las empresas vitivinícolas y la apuesta por la producción ecológica. Otros de los campos en los que inciden estas ayudas son los regímenes de calidad, la comercialización, la innovación y la implantación de nuevos productos y presentaciones. La intensidad máxima de la ayuda podrá llegar al 40% de los gastos subvencionables.
Con las propuestas recibidas de cada una de las medidas de apoyo al sector, la Dirección General de Industrias y Cadena Agroalimentaria elaborará un listado ordenado en función de la puntuación obtenida en base a la aplicación de los criterios de priorización establecidos en el Real Decreto de aplicación, para su envío al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y aprobación definitiva en la Conferencia Sectorial de Agricultura en concurrencia competitiva con los proyectos presentado por otras comunidades autónomas.