La empresa almeriense Vellsam sigue afianzándose en los mercados europeos y en sus Planes de Expansión de 2019 contempla la llegada a nuevos países del continente como Moldavia y Chipre, con los que la cifra de países a los que llegaría la empresa sigue ampliándose y supera ya la treintena.
Moldavia y Chipre son dos países fundamentalmente agrícolas. En Moldavia, más de la mitad de la población se dedica a la agricultura, siendo sus cultivos muy variados pero destacando principalmente los frutales como la manzana, el melocotón o la fresa, así como los cereales como el trigo o el maíz. Por su parte, en Chipre los cultivos más relevantes son los cítricos y las patatas.
Vellsam, pionera en la investigación, diseño y producción de soluciones biotecnológicas, tiene el objetivo de mejorar la forma en que se cultivan los alimentos de buena parte del mundo y podrá aportar en estos nuevos países toda su experiencia en este tipo de cultivos.
La entrada en Moldavia y Chipre da a Vellsam “más presencia en Europa”, a la vez que le permite “ampliar la oferta de nuevos productos para cultivos exigentes como lo son los de estos países a causa de las temperaturas que se dan en ellos”, explica María Zamora, consejera-delegada de la empresa almeriense. En el último año, Vellsam ya había extendido su mercado europeo en países como Eslovenia y también en Sudamérica llegando a Bolivia, estando presente por todo el mundo en lugares tan dispares como Chile, Perú, Argelia, Jordania, China, India o Colombia.