Almerienses, murcianos y alicantinos unieron ayer sus voces en la capital de España en pro de que se les garantice el agua para poder cultivar, o lo que es lo mismo, vivir, generar empleo y riqueza en una de las zonas agrícolas más emprendedoras de este país. Bajo el lema ‘Sin agua, desierto y paro’ alrededor de 50.000 personas caminaron por las calles de Madrid hasta situarse frente a la sede del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, donde procedieron a la lectura del Manifiesto Levantino por el Agua, documento que recoge las propuestas que le hacen al Gobierno para que actúe y asegure la continuidad de las plantaciones hortofrutícolas en la Huerta de Europa.
Desde Almería, la mayor parte de los desplazados a Madrid para participar en esta primera movilización conjunta -organizada por el Círculo por el Agua- ante el Ministerio, procedían del Levante almeriense y la comarca del Almanzora. Además, acudieron los representantes de las organizaciones agrarias, entre ellos Pascual Soler, vicepresidente de Asaja-Almería; Andrés Góngora, secretario provincial de Coag-Almería; y Francisca Iglesias, secretaria general de UPA-Almería. También, en la cabecera de la manifestación estuvo presente José Antonio Fernández, portavoz de la Mesa del Agua de la provincia de Almería, así como empresarios hortofrutícolas y miembros de las comunidades de regantes más afectadas por la falta de agua.
Junto a este movimiento reivindicativo, los productores llevaron a cabo un reparto gratuito de hortalizas, como muestra de su protesta ante la falta de actuación del Gobierno a la hora de procurar que los cultivos de esta zona se puedan regar sin problemas.
La manifestación «ha sido un rotundo éxito y la voz de los regantes se ha escuchado con fuerza en Madrid», valoró el portavoz de la Mesa del Agua de Almería, quien, a su entender, después de esto, «el Gobierno debe tomar nota y no puede permitirse el lujo de mirar para otro lado». En este sentido, José Antonio Fernández insistió en el que el Levante España necesita «con urgencia que todas las administraciones competentes ejerzan un papel activo para resolver el problema del agua, de lo contrario será el Gobierno el que tenga que afrontar males muchos mayores si se permite que las provincias de Almería, Murcia y Alicante se vean abocadas a un empobrecimiento económico galopante».
La situación de carencia de agua para riego se vio agravada en esta zona por el cierre del Trasvase Tajo-Seguro, y el del Negratín-Almanzora. Además, los almerienses no entienden como cinco años y medio después de que quedara inutilizada la desaladora de Villaricos, sigue aún sin llevarse a cabo la reparación que precisa para ponerse en marcha. Cabe recordar que los regantes ya se manifestaron al inicio de la presente campaña en las instalaciones de la desaladora para reivindicar su puesta en funcionamiento y evitar así que mueran los cultivos de la zona.
Regantes, empresarios, productores y otros colectivos de profesionales que forman parte de la Mesa del Agua, y por tanto de la organización de la manifestación, volvieron a dar un nuevo toque de atención a los dirigentes políticos en el Gobierno central con la esperanza que, en esta ocasión no solo sean escuchados, sino que sus mensajes lleguen a buen puerto.
Entre las peticiones, el Círculo por el Agua exige que las desaladoras existentes en las tres provincias se pongan al máximo de producción; que se aproveche en riego todos los recursos de la regeneración de aguas y la ejecución de obras hidráulicas que garanticen el acceso al agua en condiciones de igualdad, tanto para regadío como para consumo humano. Además, solicitan una justa y proporcionada tarifa para regadío y hogares, el riego de socorro para salvar millones de frutales del Levante, nuevas tarifas del trasvase Tajo Segura y la perdurabilidad de este acueducto, y la apertura de la batería de pozos de la Cuenca del Segura para paliar la falta de agua en el sureste español.
