Según informan los servicios del Parlamento Europeo, los eurodiputados de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria reiteran su apoyo por 44 votos frente a 18 a la introducción de etiquetado obligatorio de país de origen la leche y, también, de los productos cárnicos en los que dicha norma no está aún vigente. Los parlamentarios argumentan que ello ayudaría a mantener la confianza del consumidor en los productos alimenticio, haciendo que la cadena de suministro de alimentos sea más transparente.
La propuesta de resolución, que debe ser aprobada por el Pleno en abril o mayo, requeriría a la Comisión para que presentara propuestas con el fin de que se introdujera la obligación de indicar el país de origen en el etiquetado para la leche y la leche utilizada como ingrediente en los productos lácteos, los alimentos no elaborados, los productos de un solo ingrediente y para ingredientes que constituyen más de 50% de un alimento.
Según el Eurobárometro, por encima del 85 % de los consumidores estaría a favor de introducir dicha medida, poniendo en entredicho los argumentos de la Comisión, hasta ahora reticente a presentar iniciativas legislativas en base a que su previsión de que los consumidores no estarían dispuestos a sufragar los costes derivados de la misma.
La Unión de Uniones considera, en coincidencia con el Parlamento, que en la situación actual del sector lácteo la indicación obligatoria del origen de la leche que se vende como tal o que se utiliza como un ingrediente en los productos lácteos, es una medida fundamental para proteger la calidad de los productos lácteos, combatir el fraude en los alimentos y proteger el empleo y la rentabilidad de las explotaciones en este sector.