En la jornada de ayer la Comisión Europea anunciaba su decisión de suspender las medidas excepcionales de apoyo establecidas para que los sectores afectados por la supresión de las exportaciones a Rusia pudieran paliar sus efectos. Asaja ha recibido dicha decisión «como un jarro de agua fría» ya que los productores españoles están aplicando correctamente los reglamentos y esta decisión se basa en las sospechas de la veracidad de las cifras y solicitudes aportadas por Polonia. De hecho, uno de los portavoces de la Comisión señalaba que las peticiones de algunos productos superaban con creces las exportaciones anuales totales de esos productos a Rusia.
«Ahora debido a la falta de responsabilidad de algunos, los agricultores almerienses y andaluces pagan las consecuencias, no es justo» señala el Presidente de Asaja-Almería, Francisco Vargas.
Según datos de la Consejería de Agricultura, en Andalucía se habían autorizado hasta el momento tres operaciones de retirada de 35.600 kilos, 15.600 de pimiento y 20.000 de pepino. De estas tres operaciones, dos proceden de Almería, lo cual demuestra que mientras algunos productores están intentando sacar provecho de la situación, otros, verdaderamente afectados, se ven ahora sin un apoyo necesario.
Asaja recuerda que este anuncio ha creado inquietud y nerviosismo en el sector, ya que la Comisión debe aclarar si la suspensión de las ayudas afectará a todos los países o sólo se aplicará en aquellas zonas donde se han detectado las irregularidades.
Por este motivo Asaja urge a la Comisión Europea a que aclare la situación y restablezca cuanto antes estas medidas excepcionales, y que ponga en marcha todos los mecanismos de control necesarios para evitar abusos y conseguir garantizar que las ayudas lleguen a los sectores y agricultores verdaderamente perjudicados por este veto.
Asimismo la Organización demanda a la Ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, que presione a la Comisión para que se restablezcan estos mecanismos y se garantice que estas todas las medidas lleguen a todos los agricultores afectados (sean miembros o no de una OP) y se incorporen productos como berenjena, calabacín, los cítricos, y frutas como el melón o la sandía.
