En el informe sobre los precios alcanzados por los productos hortofrutícolas protegidos en los principales mercados mayoristas de la Unión Europea, elaborado por la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía a partir de los datos registrados por el Ministerio de Economía y Competitividad, las frutas y hortalizas -la mayor parte- de origen nacional, se venden a precios más bajos que las que se cultivan en otros puntos de la geografía europea y en países terceros. En el caso del tomate cherry, y concretamente en el mercado de Londres, el de origen holandés casi dobla el valor al que se cultiva en Almería. Y es que mientras el que se origina en Países Bajos se paga a 4,06 euros el kilo, el almeriense no rebasa los 2,25 euros.
Estos valores corresponden a la media registrada durante la semana 43, es decir del 21 al 27 de octubre. En otros tipos de tomate, el precio es similar para el fruto llegado de ambas zonas, con algún céntimo más para el tipo pera español. Sin embargo, en el larga vida, destaca el valor que adquiere el producto británico en su propio mercado, casi 0,40 euros por encima del tomate de origen español u holandés. Sobre esta apuesta por su propio producto, Francisco Vargas, presidente de Asaja Almería, resalta que «a diferencia de nosotros en otros países europeos valoran mucho más sus productos que los que se cultivan fuera, lo que demuestra que tienen mayor conciencia sobre el desarrollo de sus sectores».
Las diferencias en el precio al que se comercializan en este mercado mayorista concreto, el londinense, los productos de origen de holandés y español se mantienen en general. Así, por ejemplo, y según el informe de Agricultura, el pimiento enviado por Países Bajos se pagó a 1,83 euros el kilo durante la semana de referencia, mientras que el cultivado en territorio español cotizó a 1,08 euros el kilo. En este producto, el producto británico alcanzó un valor de 2,25 euros. Destaca el precio que se pagó en el mercado londinense por el pimiento procedente de Thailandia, ya que superó los 8 euros, así como el egipcio que se valoró por encima de 2,84 euros el kilogramo.
El presidente de Asaja Almería encuentra explicación a este comportamiento de los precios en el mercado de la capital inglesa, entre otras argumentaciones, en la capacidad de influencia que tienen los operadores comerciales holandeses en el mercado británico en general. Y es que, afirma Vargas, «tradicionalmente Países Bajos ha sido y es el principal suministrador de productos hortofrutícolas en el mercado británico y saben vender su producto mejor que el resto debido a la capacidad y posicionamiento para abastecer las demandas de Inglaterra. De esta forma comercializan su producto a un valor más alto que el que distribuyen de otras zonas productoras».
Sobre el hecho de que, en términos generales, y teniendo en cuenta el resto de los principales mercados mayoristas de la Unión Europea, bien París, Milán o Perpignan, los productos españoles obtengan menor precio que los de otras zonas productoras, Francisco Vargas comenta que «cuando entramos en la entonces Comunidad Económica Europea, y para competir con el resto de productos, España entró con un precio más bajo, y este comportamiento se mantiene en el tiempo, sobre todo en momentos del año en los que mantenemos un cierto nivel de calidad». A colación, señala el presidente de la patronal agraria de Almería, «solo cuando su producto no puede competir en igualdad con el de la provincia de Almería, es cuando el nuestro obtiene en los principales mercados un precio mejor».
Cabe destacar también que el tomate español, por ejemplo, también se pagó más barato en comparación con el de origen marroquí en el mercado de Perpignan Saint Charles. El producto llegado a dicho punto procedente de Marruecos se pagó, en la semana 43, a 0,54 euros el kilo, mientras que el tomate español se valoró a 0,48 euros. Dentro del territorio francés, en el mercado de París Rungis, en cambio, tanto el tomate español como el marroquí marcaron el mismo precio, concretamente, 0,65 euros, según el informe elaborado por la Consejería de Agricultura.