El secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, ha mostrado hoy su satisfacción por el acuerdo alcanzado en Bruselas por las instituciones comunitarias sobre la reforma de la Política Común Pesquera (PCP) ya que el Parlamento Europeo ha aceptado, con muy ligeros retoques, el texto que le proponía el Consejo como documento de compromiso. En concreto, Domínguez ha destacado el hecho de que no se hayan modificado los textos sobre Rendimiento Máximo Sostenible y sobre descartes, «lo que supone un logro muy importante porque se trataba de los puntos donde el Consejo había llegado al límite».
Según el secretario general de Pesca, del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, España había apostado por un acuerdo bajo la Presidencia irlandesa debido a su mayor experiencia en materia pesquera y porque «nos había dejado muy claro que no quería una reforma de la PCP en contra de los intereses de España». Por lo tanto, el deseo del Gobierno era que se cerrara un acuerdo lo más rápidamente posible, «siempre que se respetaran nuestras exigencias mínimas».
En este sentido, Domínguez ha recordado que en la reunión del pasado mes de mayo, el Consejo agotó su margen de flexibilidad y llegó a un límite que no podía rebasar en materia de descartes. Ahora tocaba que el Parlamento Europeo flexibilizara sus posturas para hacerlas compatibles
Domínguez también considera que esta reforma va a traer para España grandes cambios en la forma de pescar y también algunos beneficios. Pero sobre todo, «la política de descartes va a introducir una flexibilidad en la manera de gestionar nuestras cuotas, va a permitir capturar especies de las que no tenemos cuota, (capturas accesorias en nuestras pesquerías), y que podrán computarse contra la cuota de la especie principal. Se trata de romper el principio de estabilidad relativa, algo por lo que había luchado España durante los últimos años», ha recalcado.