La Estación Experimental Cajamar Las Palmerillas ha participado en la conferencia que se celebra desde ayer en Bruselas sobre seguridad alimentaria y mejora de prácticas culturales en la producción vegetal. Este foro lleva por nombre Hungry for change (Hambrientos por el cambio) y está organizada por la Asociación Europea de Protección Vegetal (ECPA) con el objetivo de aumentar la confianza del consumidor en la seguridad alimentaria y contribuir para una producción de alimentos sanos de alta calidad, incrementando la productividad y mejorando las prácticas culturales, y manteniendo la salud de los cultivos. Esta conferencia se engloba dentro del proyecto «Time to Change» que la ECPA ha puesto en marcha para la gestión de residuos en los cultivos.
La Estación Experimental Cajamar Las Palmerillas participa en este encuentro por tratarse de un centro de referencia en el sur de Europa, siendo uno de los colaboradores del proyecto ‘Producción agrícola mediterránea bajo invernadero, España ejemplo de buen hacer’ que pretende extender las buenas prácticas en el uso de productos fitosanitarios mediante cursos para formadores.
Juan Carlos Gázquez Garrido, responsable del departamento de Transferencia de la Estación Experimental Cajamar Las Palmerillas, presentó las claves del éxito del modelo de la agricultura protegida del levante español y los principales retos frente a los residuos de pesticidas a los que se enfrentan los productos. Mostró cómo mediante el uso combinado de fitosanitarios y el control biológico Almería se ha convertido en referente en las producciones mediterráneas. «La agricultura española, y en particular la almeriense, ha hecho y sigue haciendo un trabajo excelente, optimizando el uso de los productos fitosanitarios. Son las buenas prácticas de nuestros agricultores, en la utilización de estas soluciones, las que aseguran la eficacia, seguridad y rentabilidad de su actividad», expuso durante su intervención.
Las claves de este éxito han sido la masiva implantación del control biológico junto con la aplicación de estrategias preventivas, la mejora en el aislamiento de los invernaderos, la gestión del clima para evitar la aparición de enfermedades y la aparición de productos fitosanitarios respetuosos con la fauna auxiliar y por lo tanto más respetuosos con el medio ambiente.