La consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, ha resaltado, con motivo del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, «el compromiso de la Junta de Andalucía con las iniciativas promovidas por mujeres en los territorios rurales andaluces pese al contexto actual de crisis, recortes y reforma laboral». Para Aguilera, «la apuesta por la perspectiva de género en las acciones emprendidas por los Grupos de Desarrollo Rural (GDR) andaluces ha permitido importantes avances en el acceso de la mujer al mercado laboral y, por extensión, en la vida de los pueblos».
Como prueba del efecto que tienen las políticas de igualdad sobre el desarrollo sostenible de los territorios, la consejera ha señalado «la importante apuesta por actuaciones con enfoque de género de los Grupos de Desarrollo Rural (GDR) en el marco del programa LiderA, que ha hecho posible la creación y mejora de la calidad de casi 5.300 empleos femeninos, entre 2009 y 2011, cifra que representa el 45% del total de los empleos generados». Asimismo, según Aguilera, el tejido empresarial femenino en el sector agrario andaluz ha crecido un 6,7% en estos dos últimos años, hasta alcanzar las 9.600 empresarias. «Ello indica que pese a un sector agrícola todavía masculinizado, las iniciativas empresariales de mujeres en el ámbito rural siguen consolidándose incluso en estos años de crisis», ha apuntado la consejera.
En opinión de Aguilera, «estos datos incrementan su importancia si tenemos en cuenta que del total de empleos creados en dicho período con contratos a tiempo completo, fijos y en la categoría de directivos y técnicos, el 50% ha sido para mujeres, que rompen así con la tónica de la temporalidad y las categorías más bajas».
Según Clara Aguilera, la implementación de la perspectiva de género en la primera fase del programa LiderA, ha dado como resultado la ejecución por parte de los GDRs de 1.099 iniciativas con enfoque de género que han movilizado una inversión de 134 millones -el 35% del programa-, «lo cual representa una importante contribución a la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en los territorios rurales de Andalucía».
La consejera de Agricultura ha destacado además que casi el 50% del total de los proyectos con enfoque de género -550- han sido puestos en marcha por una mujer o una empresa de mujeres (aquella en la que más del 50% de la participación o titularidad es femenina), y ha resaltado que el 42% -465 proyectos- han creado empleo de calidad para mujeres, «un hecho relevante si tenemos en cuenta la difícil situación económica actual, que afecta aún más a las mujeres», señaló Aguilera.
Iniciativa de los Grupos de Desarrollo Pesquero
Asimismo, la consejera ha señalado la contribución de los siete Grupos de Desarrollo Pesquero andaluces a la incorporación de la mujer al sector de la pesca, y ha recordado que uno de sus objetivos estratégicos es «promover la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, que permita alcanzar un buen desarrollo social de las zonas pesqueras». En ese sentido, ha destacado el proyecto de apoyo a las emprendedoras del sector pesquero que vienen desarrollando estos grupos, que supondrá una inversión de más de 162.000 euros, y que está previsto que concluya a finales de este año.
Esta actuación persigue como principales objetivos potenciar proyectos, iniciativas o actividades que contribuyan a la integración efectiva de la mujer en el sector pesquero, la elaboración de un programa de formación y asesoramiento para la capacitación e inserción laboral, especialmente para jóvenes y mujeres, y la difusión de las mejores prácticas empresariales llevadas a cabo por personas emprendedoras.
La mujer en el sector pesquero andaluz
De acuerdo con un estudio referido a 2011, dos de cada diez empleos en el sector pesquero andaluz son ocupados por mujeres, lo que representa un 23% del empleo total del sector. A diferencia del empleo masculino, el cual se reparte de forma más equitativa, el empleo de la mujer en la pesca se especializa en las actividades vinculadas a las labores extractivas. Tan sólo el 4% de las mujeres desarrollan sus tareas en actividades directas.
Mientras que el empleo femenino tan sólo representa el 1% de los trabajadores a bordo de buques, la cifra se eleva al 3% en el caso del marisqueo a pie y a un 10% si se analiza el empleo de la actividad acuícola. Este escaso papel de la mujer embarcada en el sector contrasta con el de la mujer como armadora, siendo propietarias del 17% de los buques, destacando la provincia de Cádiz con un porcentaje superior a la media (23%).
Frente al escaso empleo de la mujer en las actividades directas, las vinculadas a las labores extractivas ocupan el 96% restante del empleo femenino en la pesca, llegando a representar más del 34% del empleo total indirecto del sector pesquero andaluz. Destacable es el empleo femenino en el sector transformador, donde ocupa el 58% del empleo total generado por esta industria andaluza. Cifra que aumenta hasta el 81% en la industria conservera amparada bajo el Consejo Regulador de melva y caballa de Andalucía, donde el carácter artesano y manual de su producción requiere un trabajo cualificado y minucioso desempeñado desde antaño por manos femeninas.
Reseñable es la actividad minorista, donde casi el 40% del empleo que genera está ocupado por mujeres, destacando la provincia granadina, donde el 50% del empleo en la actividad detallista está ocupado por mujeres.
